Uno de esos Domingos de limpieza en los que estás más nostálgico que de costumbre mientras estaba colocando y limpiando mis manuales roleros, volvía a lamentarme por todas aquellas lecturas pendientes. Como ahora estoy con Star Wars más a tope que de costumbre, de lo que hablaré en un podcast futuro al respecto, comencé a revisar cosillas viejas que tenía por aquí y por allá. Apareció ante mí lo que fue mi verdadero comienzo rolero, con lo que realmente me conecté con esta afición. Mi manual de Star Wars el juego de Rol, fotocopia de una fotocopia de una fotocopia, en un formato bastante regulero con dos páginas por hoja, en apaisado con una encuadernación que ha sufrido los devenires del tiempo.
Será que soy un sentimental, o que sufro de síndrome de Diógenes, pero no me deshice de ese manual en su momento y ahora aunque tengo mayor facilidad para comprar material rolero, me gusta seguir teniendo ese fetiche que me transporta a tiempos ya cada vez más lejanos. Toda esta perorata para poner unas cuantas fotos de un manual fotocopiado, pero es algo más que eso, espero que para unos sea una mirada a un pasado del que guardan gratos recuerdos y para otros una pequeña visita al museo.
Con esto comenzamos algunos y algunas. Me apetecía hacerle este pequeño homenaje a mi primer manual rolero. Había pensado hacer un hastag en twitter para rendirles homenaje a nuestros manuales fotocopiados, así que nada si te apetece pues le echas una foto o pones algún comentario en twitter con el hastag #fotocopiarolera y así agradecemos las incontables horas que nos han regalado.
En esta imagen podemos disfrutar del estado añejo de este fantástico volumen
No recordaba a la Princesa y a Han tan morenos ;)
La estrella de la muerte no parece tan evidente aquí
Parece que aquí se han librado unas cuantas aventuras…
Contraportada espartana sin muchas florituras
En un intento de complementar el podcast de Milanosfera ¿Poca letra y mucho dibujo? una pequeña muestra de dónde venimos. La afición ha evolucionado y eso en mí humilde opinión es algo bueno, puesto que esos cambios dotan de vida a todo esto de los juegos de rol. Estoy seguro que en aquella época también habríamos disfrutado de manuales tan preciosistas como los que se ven hoy en las estanterías, pero he de decir que gozo como un marranete releyendo manuales que a más de uno de los nuevos jugadores de hoy probablemente les parezcan feos y difíciles de leer. Creo que es más una cuestión generacional, aunque sigue uniéndonos lo fundamental de esto que es la propia afición de vivir historias en mundos que existen tanto en esos libros fotocopiados con sistemas en los que para hacer una acción has de tirar miles de dados, como en otros con ilustraciones tan evocadoras y sistemas “narrativos”.
Disfrutad de nuestra afición (ojo que uso el imperativo)
He hablado.
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